Nunca es tarde para adquirir confianza detrás del volante, si se reconoce que el miedo a conducir es natural o una amaxofobia.
Por Sheyla Mosquera
El miedo a conducir un automóvil hace que dependas de otras personas para movilizarte y pierdas la oportunidad de ser independiente. Sin embargo, con terapias psicológicas y prácticas de conducción seguras, si el temor es natural o por amaxofobia, desaparece.
Estudios indican que tanto los hombres como las mujeres temen manejar un vehículo en algún momento de sus vidas. Pero, si aprenden a conocer sus sentimientos, a prestar más atención y a superar el miedo a conducir, adquieren la habilidad de ser un buen automovilista.
Los conductores de automóviles necesitan estar en armonía, ser positivos, seguros y sin problemas emocionales. Sobre todo, manejar sin temor y con respeto en cualquier parte del mundo.
El doctor Lenin Salmon Alvarado, especialista en psicología clínica, explica que si alguien vive, por ejemplo, en los Estados Unidos, es imprescindible que aprenda a manejar. Pues la vida en ese país está basada en la autonomía y en el desarrollo del desenvolvimiento individual.
“Ninguna persona debe depender de otra para su movilización. Y no es que se deba dejar de usar el transporte público, pero tampoco limitarse a ese único medio”, precisa.
La ventaja de aprender a conducir te permite ser libre para ir adondequiera, visitar a los amigos, pasear o ir a trabajar. Es decir, tendría un mejor estilo de vida. Por eso, nunca es tarde para adquirir confianza detrás del volante.
Lógicamente, agrega Salmon, la persona necesita prepararse de manera técnica mediante la práctica. Para ello, existen organizaciones que ponen al día en todos los detalles del funcionamiento y manejo de un vehículo.
“El comenzar este proceso, la persona que desea conducir se dará cuenta no solamente que es sencillo de realizar, sino que también se sentirá orgullosa de haber vencido un temor que la tenía limitada sin una verdadera razón”, anota el psicólogo.
¿El miedo a conducir es natural o amaxofobia?
Hay gente que experimenta temor a conducir, dice la psiquiatra María del Carmen García Moncayo. Pero, es natural en quien va a manejar por primera vez o en alguien que aún no tiene la experiencia suficiente. Por lo que no hay que confundir esto con una fobia.
Sin embargo, hay casos de individuos que pueden presentar una fobia específica a conducir vehículos o incluso a subirse en ellos, la que se denomina amaxofobia.
La amaxofobia parece ligada al deseo de crecer y de autoafirmarse que no han sido resueltos. En ocasiones, entornos sobreprotectores dificultan el desarrollar un sentido de autoconfianza y control de las situaciones”.
También son factores predisponentes la poca tolerancia a la frustración o al estrés. A una gran autoexigencia personal, a la baja autoestima y a un pensamiento rígido.
La amaxofobia o el miedo a manejar puede incluso aparecer cuando una persona intentó aprender con alguien violento o sin paciencia, que no pudo transmitir los conocimientos de manera precisa, dice el ingeniero Diego Naranjo García, jefe Nacional de Educación y Seguridad Vial de Aneta (Automóvil Club del Ecuador).
“Esa experiencia genera desconfianza e inseguridad al momento de volver a aprender conducción. De allí, la importancia de prepararse en escuelas acreditadas por la autoridad de Tránsito”.
El miedo a conducir también se produce cuando las personas se ven involucradas en un siniestro de tránsito. Hecho del cual resultaron heridos, fallecidos o graves daños materiales.
“Eso crea el temor de que pueda volver a ocurrir. Por lo cual, el sujeto no desea regresar a manejar un vehículo. En este caso, es preciso buscar ayuda psicológica y tomar clases de refuerzo para retomar la confianza”.
“Conduce, pero sin exceso de confianza”
En Ecuador no existe una investigación acerca del miedo a manejar, asegura Diego Naranjo. No obstante, la Agencia Nacional de Tránsito, en conjunto con el Ministerio de Transporte y Bloomberg Philantropics, en diciembre de 2022, lanzó su estudio del anuario de seguridad vial, “donde se puede descubrir un dato bastante interesante”.
De acuerdo con este estudio, en Ecuador, las víctimas mortales en el último año fueron un 85% hombres y un 15% mujeres.
Es decir, refiere Naranjo, que el género masculino tiene exceso de confianza al realizar la conducción. Asimismo, no contempla de manera acertada los factores de riesgo que pueden existir en la vía.
Por lo tanto, se puede determinar que el género femenino tiene mayor atención y respeto al conducir, ya que puede existir un temor de sufrir un siniestro.
¿Qué necesito para superar el miedo a conducir?
Para superar el miedo a conducir o vencer la fobia, es necesario realizar un diagnóstico adecuado, según García. Lo realiza un médico psiquiatra o un psicólogo clínico, a través de una buena historia clínica.
“El objetivo del tratamiento es mejorar la calidad de vida, que se logra al superar la fobia. Y sucede cuando se comprende y controla los pensamientos, emociones y reacciones”.
El método más efectivo contra la amaxofobia es la terapia de la conducta. Sin embargo, a veces, se requiere de tratamiento psicofarmacológico para ayudar al paciente a sentirse mejor.
La terapéutica consiste en la exposición paulatina y gradual al estímulo fóbico. Su propósito es provocar una desensibilización sistemática. Significa modificar la conducta al aplicar jerarquía de estímulos estresantes, imaginativos y en vivo.
También se aplica en la terapia una reestructuración cognitiva (se cambia el pensamiento negativo dirigido al control de las ideas irracionales catastróficas) y técnicas para el manejo de la ansiedad.
Según la psiquiatra, no existe un número específico de sesiones para erradicar superar el miedo a conducir, ya que dependerá de la motivación para el cambio. Incluso, del tiempo que el paciente lo posea o de los eventos que pudieran surgir entre sesiones, etcétera.
“Lo importante es que enfrente el problema, lo conozca, lo acepte y busque la ayuda profesional para superarlo”.
García asegura que el paciente conseguirá vencer el temor, se sentirá mejor e independiente. Y podrá conducir un vehículo no solo en su país, sino en otros escenarios”.
Tengo miedo, pero quiero manejar
Si ya identificaste que tienes miedo a conducir, pero quieres manejar. Diego Naranjo sugiere lo siguiente:
- Asiste a un profesional en psicología: Te ayudará a superar el miedo.
- Si no sabes conducir todavía: Toma clases en una escuela acreditada. No lo hagas con un familiar o amigo, porque no es un profesional y va a empeorar tu miedo.
- Si tienes conocimiento de manejo: Acércate a una escuela de conducción para que tomes clases de refuerzo, ya que ayudará a tu confianza.
- Cuando salgas de la escuela de conducción: Practica en vías de poca carga vehicular y en vías urbanas que no necesitas generar mayor velocidad. Te ayudará a que practiques mejor.
- Descubre tus fortalezas y debilidades: Hazlo poco a poco. Posterior a ello, sal a las vías con mayor tráfico.
- Practica siempre conducción segura: No confíes solo en tus conocimientos o conducción. También está atento a los errores de los demás.
PNL, lo que hicieron otros para aprender a conducir
La Programación Neurolingüística (PNL) también puede ayudarte a superar el miedo a conducir, dice la psicóloga argentina Débora Chajet, master trainer en PNL.
Esta disciplina estudia la estructura de las habilidades de excelencia. Y “si alguien puede hacer algo con excelencia, con maestría. Todos podemos, si aplicamos los mismos elementos”, agrega la directora de PNL Buenos Aires.
No obstante, hay quienes sienten mucho miedo de lograr este objetivo. Y para superar el temor a manejar existen algunos consejos elaborados de estudiar a individuos que no solo conducen bien, sino que lo hacen con serenidad y disfrute.
¿Qué es lo que ellos hacen?
- Se representan el conducir motivados y atractivos: ¿Cuándo piensas en manejar qué imagen viene a tu mente? ¿Te ves enfrentando situaciones peligrosas o de riesgo? ¿O conduciendo con seguridad, tranquilidad y feliz? Es importante construir una imagen de ese objetivo deseado, que sea bien vívida, y que incluya también sonidos, aromas, sensaciones placenteras y agradables.
- Consideran valioso manejar: Quienes disfrutan conducir se centran en lo que ganan por estar al volante. En los beneficios y oportunidades que les trae, y no tanto en los problemas o riesgos que conlleva. ¿Qué es lo que ganarías al conducir?
- Activan emociones positivas: La gente que conduce sin temor activa emociones como seguridad y confianza. En parte, este estado se logra con la práctica al enfrentarse de manera cotidiana con el tránsito.
- Practican ejercicios: De relajación antes de subirse al coche y de respiración profunda mientras están al volante. También técnicas específicas de anclajes. En PNL ayudan a activar las emociones mediante el uso de estímulos elegidos previamente (la presión en un dedo, una determinada frase, por ejemplo).
- Tienen creencias positivas: La gente con miedo suele creer cosas como “Manejar es peligroso”o “Nunca voy a poder conducir”. La PNL, en este caso, revisa el origen de las creencias negativas o de las situaciones traumáticas y las resuelve con protocolos de trabajo terapéutico muy útiles.
Información: Dr. Lenin Salmon 593-4-228-4647; Dra. María del Carmen García 593-4-230-3838; Ing. Diego Naranjo: dnaranjo@aneta.org.ec y Débora Chajet: info@pnlbaires.com.ar
2 Comments
Deysi Fernanda Guaman Gaibor
Excelente explicación
Franklin perez
Excelente la explicación muy didáctica y de fácil compresión