Las artes marciales son un conjunto de movimientos de ataque y defensa para el bienestar propio y de tus seres queridos. La defensa personal te brinda seguridad y autoconfianza.

Por Rafael Viteri Almeida

Podría sonar contradictorio. Pero las artes marciales te ayudan a sentirte más tranquilo y seguro. ¿Por qué? Porque si tú sabes cómo defenderte ante posibles agresiones no tendrás temor de enfrentar un peligro que no implique el uso de armas de fuego o cortopunzantes.

Las personas que saben defenderse pueden actuar con más calma al tener conocimiento de ataque y defensa sólidos. Esto es importante, más que nada los jóvenes, ya que tienden a ser más impulsivos a temprana edad.

Primero, ¿qué son las artes marciales mixtas y cuántos tipos de artes existen?

Las artes marciales mixtas son un conjunto de deportes de lucha y contacto. Está autorizado el uso de diferentes técnicas de pelea y estilos en un combate. También están permitidas tanto las técnicas de golpe como las técnicas de sumisión (en el suelo o de pie).

Las artes marciales son variadas; existen varios ejemplos: karate, taekwondo, boxeo, kickboxing, muay thai, kung fu, judo, jiu jitsu (japonés-brasileño), etc. Estas artes tienen origen oriental de países como Japón, China y Tailandia.

Por otro lado, las artes marciales mixtas (MMA) por sus siglas en inglés,   tuvieron un bum en el año 1993, cuando el estadounidense Rorion Grace desarrolló el primer torneo de Ultimate Fighting Championship, popularmente conocido como UFC. Grace fue uno de los grandes responsables de exportar este deporte por todo el mundo.

Beneficios de la práctica de artes marciales mixtas

 

El entrenador de MMA, Alonso Castaño, nativo de Colombia, con más de 15 años de experiencia en las artes marciales y propietario de la academia AC High Performance Training, hablará sobre los beneficios que tiene la práctica de artes marciales y cómo hacer el entrenamiento de forma correcta:

“Antes de entrenar, lo esencial y básico es el calentamiento. Se recomienda calentar entre 15 y 20 minutos. Esto es porque durante la práctica de artes marciales se utilizan varios músculos del cuerpo”.

“Por otra parte, a medida que nos fortalecemos con los entrenamientos, hay que recordar que no deberíamos utilizar la misma fuerza con nuestros oponentes. Es decir, si practicamos constantemente con sacos de boxeo, no significa que golpearemos o patearemos con la misma fuerza porque podemos lastimar seriamente al adversario”.

Con respecto a la modalidad de entrenamiento con objetos, el experto mencionó lo siguiente: “ahora existe tecnología para medir el peso del objeto de entrenamiento, como costales, sacos de arena, etc., cada alumno debe entrenar de acuerdo al nivel de experticia y fuerza que tenga, si se excede al principio puede llegar a lesionarse”.

Sobre la pasividad que brindan las artes marciales, el entrenador Castaño dice esto: “cuando uno tiene un vasto conocimiento en estilos de pelea, se siente tranquilo y seguro. No trata de buscar peleas por cualquier motivo, sino que recurre a defenderse cuando la situación lo requiera”.

“Cabe recordar que, para dominar un arte marcial, ya sea por profesionalismo o por hobby, toma tiempo y mucha práctica constante”. “No es algo que se domine en poco tiempo”.

Adicionalmente, sobre los entrenamientos masculinos y femeninos, el experto opina lo siguiente: “No se debería separar a los hombres de las mujeres en los entrenamientos. Pero, si un hombre pesa 30 o 40 libras más que una mujer, la mujer no debería entrenar con él.

En cambio, un hombre sí puede entrenar con otro que pese 30 libras más debido a que los hombres poseen mayor fuerza”.

Las artes marciales liberan a los jóvenes de problemas mentales

Y el profesor Jonathan Barragán, con 15 años de experiencia en artes marciales y propietario de la academia Chuleta CascaGrossa, nos explica los beneficios de las artes marciales desde su perspectiva:

“Los jóvenes cuando entrenan artes marciales, se liberan de problemas mentales que afecten su espíritu. Se concentran tenazmente en sus entrenamientos con el fin de obtener beneficios físicos y emocionales”.

En cuanto al uso de implementos de fortalecimiento, el profesor Barragán dice lo siguiente: “para fortalecer las extremidades superiores e inferiores, se utilizan sacos de entrenamiento y protectores para brazos y piernas con el fin de amortiguar el impacto de los golpes”.

“Siempre tomamos en cuenta si el estudiante practica artes marciales por aprendizaje, etc., o si decide seguir un camino profesional en ese campo. Los entrenamientos para futuros peleadores profesionales incluyen constantes sparrings (peleas de entrenamiento), golpear objetos sólidos utilizando protectores llamados pads en los brazos y piernas”.

Por otra parte, sobre el cuidado de las lesiones, el experto añade: “para prevenir las lesiones se realiza un calentamiento de 15-20 minutos con estiramientos mejorando la elasticidad de las extremidades, esto es en las clases de 1 hora. En clases de estudiantes avanzados que se preparan para competencias, con clases de hasta 2 horas, el calentamiento dura 30 minutos”.

Sobre el estilo de vida fuera de los entrenamientos, también dijo lo siguiente: “se recomienda que los jóvenes practicantes no consuman alcohol en exceso, tampoco tabaco. Es mejor que lleven una vida equilibrada con alimentación saludable, buen reposo y ejercicio constante”.

Recomendaciones generales de los expertos:

1.- Llevar una vida sana sin exceso de alcohol, sin ingerir tabaco ni otras adicciones.

2.- Tener una alimentación saludable para mantener un cuerpo y salud estables.

3.- Combinar el entrenamiento de artes marciales con pesas, flexiones, abdominales, etc., con el fin de fortalecer mucho más el cuerpo.

4.- Utilizar las artes marciales solamente para defenderse en caso necesario. Nunca se debe utilizar la fuerza para atacar bajo cualquier circunstancia.

5.- Entrenar con la intensidad acorde a tu grado de experticia.

6.- No entrenar con enojo o ira porque te puedes lastimar a ti mismo o a tus compañeros practicantes.

¿Qué podemos concluir?

Las artes marciales son una herramienta muy útil para que aprendas a defenderte cuando sea estrictamente necesario. Y, a su vez, ayudan a mejorar el espíritu mediante la guía correcta de los maestros. Los jóvenes suelen ser más explosivos a temprana edad, y las artes marciales les pueden ayudar mucho a mitigar un mal temperamento mediante entrenamientos donde se requiere de concentración.