Tengo 64 años y ando con problemas de gastritis. Siento mucho ardor en la boca del estómago. Y no sé exactamente qué me hace daño, si el café o el pan. Lo único cierto es que no puedo tomar vino, consumir grasas o comer tomate. Necesito saber qué sucede dentro de mi estómago y por qué estos alimentos me hacen daño. También si la gastritis afecta la presión arterial. Pues ocurre que cuando me arde el estómago siento al mismo tiempo como un peso en la nuca, pero pasa rápido.
Luz Marina Vivas, Miami, Estados Unidos
RESPUESTA: Estimada Luz, es común atribuir este tipo de síntomas a la gastritis. Sin embargo, en la mayoría de los casos la causa no tiene relación con eso.
Definitivamente, lo ideal es saber qué ocurre dentro de su estómago, y el método efectivo para el diagnóstico es una endoscopía digestiva alta. La endoscopía hoy en día es un procedimiento de muy bajo riesgo que se realiza en ayunas, dura aproximadamente 15 minutos y que en la mayoría de los casos se realiza bajo sedación. Motivo por el cual los pacientes no tienen una experiencia traumática, sino que por el contrario están dispuestos a volver a realizar el procedimiento cuando sea necesario.
Si al hacer la endoscopía su estómago luce normal, su diagnóstico sería lo que se conoce como una dispepsia funcional, que es la causa de los síntomas que presenta en un 75% de los casos.
La dispepsia funcional es una enfermedad de curso benigno que se relaciona con una sensibilidad mayor del estómago. Es común que se asocie con ciertas comidas como los lácteos, las grasas y ciertos vegetales. La dispepsia funcional también empeora bajo estrés emocional debido a comunicaciones perfectamente descritas entre el sistema nervioso y el aparato digestivo que se denominan «eje cerebro-intestino».
Existen causas menos frecuentes y más peligrosas. Sin embargo, no me adelantaría a pensar en ellas antes de hacer la endoscopía. Como factores predictores también deben considerarse la edad, el tiempo de evolución y la presencia de síntomas y signos asociados que se consideran pautas de alarma.
Los pacientes menores de 45 años tienen menos riesgo de tener enfermedades malignas. Asimismo, un cuadro de más de 6 meses de evolución hace pensar en una enfermedad funcional, que como decíamos antes, tiene mejor pronóstico.
Entre las pautas de alarma se debe considerar una pérdida de peso no provocada; la presencia de anemia en un examen de sangre reciente, que los síntomas despierten del sueño o que haya heces negras sugerentes de eliminación de sangre. En caso de que estas manifestaciones estén presentes, consulte a su médico de confianza lo más pronto posible.
Dr. Ignacio Hanna Jairala, gastroenterólogo del staff del Hospital Alcívar y secretario de la Sociedad Latinoamericana de Neurogastroenterología.
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